Seguimos encerrados y abundan mensajes de personas que echan de menos estar en la playa, salir a hacer deporte, acudir a un bar o cafetería. ¿Las frases del estilo “cuánto daría por...” en que nos ayudan, sirven de algo? Seguramente no, por tanto, sería muy bueno dejar de pensar en lo que no tenemos y centrarnos en aquellas cosas que sí poseemos.
Una cosa es que tengamos esperanza; es decir, para superar momentos como el presente, puede ser positivo centrarse en detalles que nos den motivos para seguir adelante, pensar que pronto volveremos a celebrar reuniones familiares, nos encontraremos con los compañeros del trabajo y que todo vuelva a ser normal. Sin embargo, estar continuamente echando en falta aquello que no tenemos, lejos de ayudarnos, nos perjudica.
Así que una buena opción para estos días es dejar de pensar en lo que nos falta y centrarnos en los que sí tenemos. Es verdad que no podeos salir, que echamos de menos dar un paseo, ir a la playa, al monte, salir a hacer deporte o cualquier otra actividad que ahora no está permitida. Sin embargo, gozamos de muchas cosas buenas. Estamos en familia, tenemos conexión a internet, disponemos de lo más valioso que tiene una persona: el tiempo. Tenemos todo el tiempo del mundo para leer, jugar y hacer acuidades que, probablemente, con anterioridad no podíamos hacer. ¿Puede ser que cuando todo esto termine echaremos de menos todo el tiempo que tuvimos y disfrutamos en casa porque estamos agobiados con el trabajo y los quehaceres diarios?
La felicidad, la alegría y la positividad se incrementa cuando dejamos de lamentarnos por lo que no tenemos y pensamos en lo que sí poseemos. No se trata de resignarnos ni de resistir estoicamente, sino de no dejarnos arrastrar por la negatividad de estar pensando continuamente en las cosas que nos faltan. Por tanto, dejemos de pensar en lo que podríamos tener, en cómo sería nuestra vida en otra situación, porque no es real y la felicidad comienza a partir de creer en la realidad, a partir del momento presente en el que aquí y ahora decido disfrutar de lo que soy y de lo que tengo.
Gracias, es muy gratificante, leer cosas tanbpositivas, y te digo porque lo digo,, pienso como tú, pero somos pocos, hay mucho dolor, cierto pero un poquito de luz, se agradece
Saludos