Todo el día sin usar el móvil… ¡y sigo vivo!

Acabo de leer un artículo sobre la dependencia de los teléfonos móviles o smartphones. Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) es el elemento tecnológico más valorado y una consultora británica TecMarck dice que llegamos a usar el dispositivo hasta 220 veces al día.

enganchado al movil jesus marreroEl artículo de «forumlibertas.com» habla de diez riesgos que debemos evitar con el móvil, porque según el artículo, Crea adicción, está hecho para engancharnos, genera ansiedad, nos quita empatía, nos desconecta de la familia, genera accidentes, interfiere en la pareja, quita espontaneidad, vulnera nuestra intimidad y resta concentración. Entonces ¿por que no se prohibe ese trasto tan peligroso?

Soy un amante de la tecnología, me encantan los medios sociales y en mi tarea docente intento que los jóvenes aprendan a usar sus móviles y tabletas para un uso positivo. Sin embargo, cuando leo artículos como estos, me da la impresión que llevamos un demonio en el bolsillo. No voy a contradecir el artículo. No es mi estilo, pero sí que conviene recordar que los dispositivos en sí no son malos. En todo caso, el problema es que hacemos mal uso de ellos.

Leo el artículo en un día en el que decidí dejar apagado el móvil. No lo enciendo desde ayer. Y no me ha pasado nada, porque insisto, el teléfono no tiene culpa de que a veces seamos mal educados y, en medio de una conversación, busquemos en nuestro bolso o bolsillo para responder a un mensaje. No es culpable el dispositivo, sino las personas. Por eso abogo por un uso positivo de la tecnología. Tengo muy claro, por tanto, que se puede y se debe dar un buen uso a esos aparatos.

Hace tiempo hice un post con la maravilla que llevábamos en nuestro bolso o bolsillo. En el artículo aludido se nombraban diez problemas que puede ocasionar el móvil. Así que me atrevo con diez ventajas, sin entrar en aplicaciones concretas ni medios sociales.

1.- Cámara de fotos: Todos los dispositivos vienen dotados hoy de excelentes ópticas para tomar fotos, que luego podemos pasar a papel fotográfico o guardar para el recuerdo.

2.- Cámara de video: Ha pasado a mejor vida. Antes siempre en casa había una cámara para grabar, con la mejora de la resolución de la grabación de los teléfonos, ya no es necesario. Es cierto que los videos ocupan mucha memoria, pero con vaciar frecuentemente nuestro dispositivo es suficiente.

3.- Mensajería instantánea: No es necesario nombrar el Whatsapp, podemos usar los SMS como forma de comunicación. Podemos enviar un mensaje a cualquier persona, sin necesidad de aplicaciones, siendo capaces de conectar rápidamente con quien necesitemos, «sin obligarles» a contestar a una llamada

4.- Periódicos: Tenemos magníficos visores de periódicos para estar informados o directamente acudir a las páginas web de los medios para leer las noticias.

5.- Correo electrónico: Hoy en día casi todo el mundo envía y recibe mensajes y notificaciones vía correo electrónico. Ya no hay necesidad de esperar a casa para sentarnos delante del ordenador a responder. Podemos hacerlo desde nuestro dispositivo.

6.- Linterna: ¡Cuantas veces nos sacan de apuros! para buscar las llaves, alumbrarnos en un lugar oscuro…

7.- Mapas: Hoy gracias a los móviles los mapas de papel no tienen demasiado sentido. Simplemente con poner una dirección en el navegador, con gran precisión nos llevan a lugar buscado.

8.- Documentos necesarios: Tengo siempre a mano mis documentos escaneados y depositados en un sitio de almacenamiento. También me ha sacado de muchos apuros cuando me he olvidado el DNI, tarjeta sanitaria, etc.

9.- Calendario y agenda: Hace años que no compro la de papel, que obviamente, es muy necesaria. Con un calendario digital se pueden apuntar todas las citas, los contactos y tener acceso a ellas sin ningún problema.

10.- Bloc de Notas: También llevaba uno encima casi siempre, que he sustituido por el bloc de notas del móvil o por una libreta en red. Para apuntar cualquier idea, recado, actividad, es muy necesario, que también tiene nuestro móvil.

Ah, y se me olvidaba:  también podemos llamar. Si necesitamos hablar con alguien, basta con buscar en la agenda, o poner el número en el teclado y hablar por el teléfono.

Con todo, insisto, los teléfonos móviles no son el demonio, sino nosotros que no le damos un buen uso. Seamos capaces de apagarlo por un día, dejemos el teléfono en un lugar determinado (al llegar a casa, casi siempre lo dejo junto con la cartera y las llaves) desconectemos un rato para conectar con nosotros mismos y con nuestros seres queridos.

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