En una conversación habitual en estos días, alguien menciona el tiempo. ¡buuuf que calor hace. Tengo ganas que llegue ya el invierno! Pero si el verano es maravilloso, las tardes son enormes, podemos ir a la playa, mucho tiempo libre para estar con los amigos, con la familia… No, quiero que venga el frío ya. Evidentemente, no voy a entrar en una discusión por el tiempo, pero sí que me viene a la cabeza el titular de esta entrada ¡Y así… se nos va la vida!

Se nos va la vida en verano deseando que llegue el invierno y en invierno pidiendo que venga el verano. Cuando tenemos ganas de comer deseando un bocado y al sentarnos en la mesa poniéndonos a dieta. No disfrutamos de lo que hacemos, sino que siempre estamos pensando o deseando cosas que no tenemos o que vendrán con posterioridad.

La semana pasada en un curso se me quedó grabado, una vez más, una idea que ya conocía con el “Carpe Diem”. En esta ocasión de forma más sencilla con el “NOW”. Citaron a un campeón mundial de Iroman, una de las pruebas más duras del mundo, en la que los atletas tienen recorrer grandes distancias a nado, en bicicleta y corriendo. No recuerdo el nombre del deportista, pero alguien quiso saber el secreto de su éxito y él respondió con la sencilla afirmación “NOW”. Ante la cara de incomprensión de su interlocutor, se explicó. Cuando estoy en el agua, sólo pienso en el agua y en nadar lo mejor posible. Al tomar la bicicleta, lo mismo, pienso sólo en la bici. Y cuando corro, solo me concentro en la carrera. El NOW. Lo que no hago nunca es pensar en la estrategia que desarrollaré corriendo mientras estoy nadando. No pienso en sí podré o no completar la siguiente prueba antes de llegar a ella. El NOW. ¡Maravilloso!

¡Cuánto tiempo y energía gastamos pensando en cómo será ese reto al que nos vamos a enfrentar dentro de unas horas! Ahora en verano, mientras estamos de vacaciones, nos pasamos el tiempo pensando en que tenemos que trabajar, si habrá cambios cuando nos incorporemos. También dedicamos tiempo a “comernos el coco”, pensando en si vamos a ser capaces de desarrollar los proyectos que pensábamos en el próximo curso. ¡Y así se nos va la vida! Cuando estamos en vacaciones, pensando en el trabajo y mientras trabajando deseando que lleguen ya las vacaciones.

Invito a que pongamos toda nuestra intensidad en vivir el NOW. Disfrutando intensamente de lo que hacemos. ¡Cuantas frases, historias, reflexiones andan por ahí en este sentido, sin que le hagamos caso!, diciéndonos que disfrutemos del ahora, del NOW. Pero no nos entra en la cabeza. Nuestra mente tiende a viajar y a divagar entre cosas que no sabemos si serán o no, si ocurrirá o no. Por eso, he tratado de incorporar una lucecita de alarma más en la cabeza. Cuando alguien me dice que le gustaría que fuera ya invierno se me enciende la luz de alarma del NOW. Y pienso ¡Y así… se nos va la vida!